No inventó el formato de los colectivos pero, para que su actuación pudiese ser comprendida, Cia de Foto necesitó construir un espacio de tránsito entre personajes e instituciones que interactuaban muy poco entre ellos. La necesidad de plantearse su propio estatuto y de negociar su existencia les dio una vocación más amplia: ciertamente hacían fotografía, pero sobre todo hacían política cultural.